Existencialismo

Una de las corrientes que más llama mi atención de la filosofía, es la EXISTENCIALISTA.

Soren Kierkegaard fue el primer filósofo que empleó el término, que luego definió esta filosofía. Existencialistas lo fueron también, Herman Hesse, Ortega y Gasset, Unamuno…entre otros.

Básicamente se trata de encontrar la VERDAD dentro de uno mismo haciendo la verdad relativa y subjetiva en contraposición con el racionalismo o el empirismo que pretende establecer verdades universales. Lo que es válido para uno puede no serlo para otro. Da lugar a actuar conforme a las convicciones propias.

De Gasset es la famosa frase “Yo soy yo y mi circunstancia”  donde la verdad va ligada a la experiencia propia vital y personal. 

Soren Kierkegaard

 

- Lo Uno o lo Otro-o-El Diario de un Seductor - fueron algunos de sus libros. Pero algo que marcó profundamente toda su obra fue, Regine Olson una muchacha danesa a la que conquistó pero con la que rompió su relación por miedos e inseguridades. La mención a ella en sus escritos es continua pero siempre indirecta. Parece que ella no comprendió su comportamiento y todo el daño que le hizo con su frialdad, pero se sintió halagada por la importancia que Soren le dio, al aparecer reflejada en todas sus obras.En el libro-Lo Uno o lo Otro- intenta responder a la pregunta Aristotélica ¿cómo deberíamos vivir?.Y en-Diario de un Seductor-trata la seducción.

            “Es muy cierto que aquel que induce a error a los otros se ha de equivocar también. Cuando un viajero perdido pregunta por un camino es acción censurable enseñarle uno equivocado y dejarlo solo; pero esto no es nada comparado con el mal que se hace cuando se lleva a alguien a perderse en el camino de su propia alma”. Del libro Diario de un Seductor.

Herman Hesse

-El lobo Estepario- es uno de sus mejores libros donde la virtud y los instintos mantienen una lucha interna. En este caso lo que marcó profundamente al autor fue un viaje a Ceilán e Indonesia éste impregno su literatura de la espiritualidad Budista e Hinduista. Además vivió en una época muy convulsa con las dos Guerras Mundiales que también determinaron su existencia. Le gustaba leer a Goethe, otro de mis autores de referencia y también frecuentaba la lectura de mitología griega.

            “Imagínese un jardín con cien clases de árboles, con mil variedades de flores, con cien especies de frutas y otros tantos géneros de hierbas. Pues bien: si el jardinero de este jardín no conoce otra diferenciación botánica que lo “comestible” y la “mala hierba” entonces no sabrá qué hacer con nueve décimas partes de su jardín, arrancará las flores más encantadoras talará los árboles más nobles, o los odiará y mirará con malos ojos.”Del libro El Lobo Estepario.

Ahondar en estos autores siempre aporta ideas nuevas.

De Taller Literario a la gorra